URBINA TEMPRANILLO VINO JÓVEN RIOJA
Cuando hablamos de vinos jóvenes de Rioja nos referimos normalmente a vinos del año, o en otros casos vinos que no tienen crianza en barrica o en botella. Lo que los hacen aún más frutales, con muchos aromas primarios, y que se suelen consumir en los dos años siguientes a su elaboración, para poder disfrutar de todas sus propiedades organolépticas. La curva de la vida de un vino joven está entre uno y tres años, ya que la carga de taninos que tiene es menor a la de un vino con crianza. Son vinos pensados para tomarlos en el mismo año que se producen como por ejemplo los vinos de maderación carbónica. Son vinos ideales para beber de forma informal, con amigos y con comidas ligeras.
Podemos encontrar dos tipos de fermentación al hacer un vino joven, la tradicional donde estrujamos las uvas y mezclamos los hollejos con el mosto, y a temperaturas bajas fermentamos para sacar el máximo potencial aromático frutal y primario de las uvas. Otro estilo es la maceración carbónica, donde introducimos las uvas enteras en el depósito y se satura el mismo con CO2 para que la fermentación ocurra dentro de las uvas, consiguiendo el máximo aroma frutal en los vinos. La duración y el proceso de elaboración es más corto que en el caso de la fermentación tradicional.
Detalles que nos indican que un vino es joven es sin duda su color que suele ser rojo vino con detalles amoratados o cardenalicios. Sus aromas que son muy frutales y su boca que tiene mucho nervio, es decir que se nota el tanino y la acidez. El Urbina Tempranillo Vino Joven de Rioja, es un vino con un elegante aroma frutal, que nos aporta fruta e intensidad, y una opción espectacular de calidad precio. En boca, se muestra sabroso, potente, con taninos maduros pero no agresivos y muy agradables. Dirección: Calle Campillo, 33, 35, 26214 Cuzcurrita de Río Tirón, La Rioja. www.urbinavinos.com
FAJITAS DE POLLO RECETA INGREDIENTES
La fajita es uno de los platos más tradicionales y populares de la cocina Tex-Mex (fusión de las cocinas mexicana y texana). Consiste en carne asada a la parrilla y cortada en tiras, servida sobre una tortilla de harina de maíz o harina de trigo. Originariamente las fajitas se elaboraban sólo con carne de vaca, pero hoy en día se han popularizado con carne de cerdo, pollo (chicken fajitas), o incluso con camarones. En algunos restaurantes se asa la carne junto con pimientos y cebollas. Los condimentos más populares para acompañar las fajitas son la crema agria, el guacamole, pico de gallo, queso o tomate.
- Crema agria: es una crema de leche fermentada, con adición de sal y aditivos, de textura suave, aromática, sabor ácido, el cual la diferencia de la crema de leche (nata), además de la alta viscosidad. En Venezuela, se la conoce como natilla, siendo una especie de crema ácida con bajo contenido en grasa (10-15%), y obtenida de la leche cruda. En Colombia existe el suero atollabuey, especie de crema de leche ácida típica de las sabanas de los departamentos de Córdoba, Sucre y Bolívar, que acompaña cualquier comida.
- Pico de gallo: es una salsa típica de la gastronomía mexicana. Consiste en jitomate, cebolla y chile picados en brunoise. A menudo incluye también cilantro, orégano, aguacate, comino y jugo de lima, llamada limón en México. El chile suele ser jalapeño o serrano. Debido a que sus colores corresponden a los de la bandera de México, también se le conoce como salsa mexicana o bandera, y los platos que acompaña se denominan "a la mexicana". Se trata de una de las preparaciones más clásicas de este país, y se encuentra en casi todas las regiones en multitud de variantes.
- Ingredientes: 1 pimiento rojo o verde, 1 cebolla mediana, 2 pechugas de pollo sin piel y deshuesadas, 1 cucharadita de pimentón dulce o picante, 1 pizca de comino molido, 2 limas, Sal y pimienta, Aceite de oliva, Tortillas de trigo, Yogur natural, Queso rallado.
- Para la salsa pico de gallo: 15 tomatitos cherry, Cilantro fresco (o perejil si lo preferimos), 1 lima (o limón), Sal, pimienta y aceite de oliva.
Cortamos las pechugas de pollo, la cebolla y el pimiento en tiras de aproximadamente el mismo tamaño, y los ponemos en un bol. Añadimos el zumo de media lima o medio limón, el comino y el pimentón, y añadimos un chorro de aceite, la sal y la pimienta. Lo mezclamos todo bien en el bol y lo dejamos marinar durante un tiempo mientras preparamos el resto. Lo ponemos todo en la sartén y lo dejamos unos 8 minutos, moviéndolo de vez en cuando para que no se nos quemen.
Salsa Pico de gallo: para hacer la salsa de tomate, cortamos los tomates cherry en trocitos y picamos el manojo de cilantro. En un bol, ponemos los tomates en trocitos, añadimos el zumo de la lima, la sal y la pimienta y un chorro de aceite. Finalmente le añadimos el cilantro picado y removemos. Hay gente a la que el cilantro no le gusta o le parece que tiene un sabor muy fuerte, lo podéis sustituir por perejil. También se le puede añadir un poco de guindilla.
Otras salsas de acompañamiento: con yogur natural, un poco de cebollino, pimienta y limón podemos hacer una salsa de yogur. Acompañarlo de guacamole, bien ya preparado o hecho casero con aguacate y zumo de limón. En otro pequeño bol, podemos rallar un poco de queso rallado, por ejemplo cheddar.
