CIUDAD DE LEÓN (PROVINCIA DE CASTILLA Y LEÓN - ESPAÑA)
León [leˈon] (en leonés Llión [ʎiˈoŋ]) es un municipio y ciudad española ubicada en el noroeste de la península ibérica, capital de la provincia homónima, en la comunidad autónoma de Castilla y León. León contaba en enero de 2013 con 130.601 habitantes repartidos en una superficie de 39,03 km², y un área metropolitana de 204.212 habitantes, distribuidos en doce municipios ocupando un área de 708,1 km².
Nacida como campamento militar romano de la Legio VI Victrix hacia 29 a. C., su carácter de ciudad campamental se consolidó con el asentamiento definitivo de la Legio VII Gemina a partir de 74. Tras su parcial despoblación con motivo de la conquista musulmana de la península, León recibió un nuevo impulso como parte del Reino de Asturias. En 910 comenzó una de sus etapas históricas más destacadas al convertirse en cabeza del Reino de León, participando activamente en la Reconquista contra los musulmanes, llegando a ser uno de los reinos fundamentales en la configuración de España. La ciudad albergó las primeras Cortes de la historia de Europa en 1188, bajo el reinado de Alfonso IX, gracias a lo cual en 2010 fue proclamada por el profesor John Keane, el rey de España y la Junta de Castilla y León como Cuna del Parlamentarismo. Desde la Baja Edad Media la ciudad dejó de tener la importancia de antaño, en parte debido a la pérdida de su independencia tras la unión del reino leonés a la Corona castellana, definitiva desde 1301.
Sumida en un período de estancamiento durante la Edad Moderna, en la Guerra de la Independencia fue una de las primeras ciudades en sublevarse de toda España, y años después del fin de la misma, en 1833, adquiriría su rango de capital provincial. La llegada del siglo XX trajo consigo el Plan de Ensanche, que acrecentó la expansión urbanística que venía experimentando desde finales del siglo XIX, cuando la ciudad se convirtió en un importante nudo de comunicaciones del noroeste con motivo del auge de la minería del carbón y de la llegada del ferrocarril.
Su patrimonio histórico y monumental, así como diversas celebraciones que tienen lugar a lo largo del año, entre las que destaca la Semana Santa, y su situación como paso obligado del Camino de Santiago, considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la convierten en una ciudad receptora de turismo nacional e internacional. Entre sus monumentos más representativos se encuentran la Catedral, el mejor ejemplo del gótico clásico de estilo francés en España, la Basílica de San Isidoro, una de las iglesias románicas más importantes de España, tumba de los reyes de León medievales y considerada como La Capilla Sixtina del Arte Románico, el Monasterio de San Marcos, primer ejemplo de la arquitectura plateresca y renacentista española, el palacio de Los Guzmanes, el palacio de los Condes de Luna, la iglesia del Mercado o del Camino la Antigua, la iglesia de Palat del Rey, la Casa de las Carnicerias y la Casa Botines, de estilo modernista y realizada por el genial arquitecto catalán Antoni Gaudí; todos ellos declarados Bien de Interés Cultural. Ejemplo destacado de arquitectura moderna, y uno de los museos de la ciudad, es el MUSAC, de Mansilla + Tuñón Arquitectos.
León dispone de una red desarrollada de carreteras y ferrocarril, además de contar con un aeropuerto con vuelos nacionales e internacionales (de momento solo a París) que tras las obras de ampliación, inauguradas en octubre de 2010, cuenta con una nueva terminal y es capaz de atender al triple de pasajeros que hasta entonces.
En 2013 se están llevando a cabo distintos proyectos en la ciudad tales como la línea de alta velocidad AVE, la reconversión del Feve en tranvía y el palacio de congresos, entre otros. El proyecto del tranvía suscitó varias críticas por parte del Partido Popular, entonces en la oposición municipal, que alegaba que su desarrollo en una ciudad como León era un proyecto faraónico y de dudosa viabilidad y anunciaron que bajo su gobierno no desarrollarían tal proyecto.
La Universidad de León, fundada en 1979 como escisión de la Universidad de Oviedo, contaba en el curso 2006-07 con 13.217 alumnos; tiene su sede en la ciudad y está catalogada, a partir de criterios como la demanda universitaria, los recursos humanos o los planes de estudio,16 como la 2.ª universidad de Castilla y León, tras la Universidad de Salamanca, y la 30.ª de España. Desde el 4 de mayo de 2010, la ciudad alberga la segunda sede de la Universidad de Washington en Europa, tras su sede de Roma, con capacidad para 500 alumnos interesados en el aprendizaje del español. La ciudad cuenta también con una sede del Instituto Confucio desde 2011.
- Toponimia: El origen del nombre de la ciudad proviene de la palabra latina legio, que hace referencia a la legión que fundó la ciudad en su actual emplazamiento. Esta tesis, comúnmente aceptada, se refuerza con el todavía válido gentilicio legionense para referirse a los habitantes de la ciudad. La evolución de Legio a León se explica fácilmente, pues en latín clásico, la gi se pronuncia como si fuese una gui, por lo que la pronunciación de Legio sería Leguio, algo que acabó derivando en el Leio o Leionem, que a su vez acabaron en el nombre actual de León.
- Símbolos: El escudo de León está compuesto por un campo de plata en el que figura un león rampante de púrpura, linguado, uñado, armado de gules y coronado de oro. Aparece timbrado con una corona abierta de oro (la forma de la antigua corona real, usada hasta el siglo XVI). En el escudo de la ciudad de León aparece representada una corona marquesal en vez de la antigua real y el león no figura coronado.
Al producirse la unión en el año 1230 de las Coronas de León y Castilla con Fernando III el Santo se dispuso que en el escudo del rey los elementos heráldicos castellanos (un castillo almenado de oro sobre un campo de gules) y leoneses formaran un escudo cuarteado. Es de destacar que en los cuartelados no había sitio para dos leones, hasta aquel momento pasantes, por lo que se les situó como rampantes para ocupar por completo los cuarteles que les correspondían. Esta es la disposición que ha llegado a la actualidad. El uso de la corona sobre la cabeza del león no apareció documentado hasta el reinado de Sancho IV de Castilla y León (1284-1295).
Actualmente el escudo de León es el símbolo de la provincia y, acompañado por adornos exteriores, de la ciudad de León.
GOGRAFÍA
- Ubicación: La ciudad de León está ubicada en una terraza fluvial en la confluencia de los ríos Bernesga y Torío, a una altitud de 840 msnm. Situada aproximadamente en el centro de la provincia, se encuentra en un lugar estratégico del Noroeste peninsular, ya que es paso obligado para ir a Galicia y a Asturias. Sus coordenadas son 42°35′03″N 5°39′00″O.
Su término municipal limita al norte con Sariegos y con Villaquilambre, al este con Valdefresno, al sur con Santovenia de la Valdoncina, Onzonilla y Villaturiel, y al oeste con San Andrés del Rabanedo y Valverde de la Virgen. El territorio del término municipal está representado en la hoja 161 del Mapa Topográfico Nacional.
- Relieve: Situado en la transición del Páramo Leonés a la Cordillera Cantábrica, su ubicación en la confluencia de dos ríos hace que la capital leonesa se asiente en una zona predominantemente llana, si bien según se aleja del núcleo urbano el terreno se eleva, encontrándose por el norte con el Monte de San Isidro y por el este con los altos en los que se encuentra Golpejar de la Sobarriba. En el término municipal se encuentran los vértices geodésicos de Valenciano, a una altitud de 938 msnm, y de San Isidro, a una altitud de 939 metros.
- Hidrografía: León está bañada por los ríos Bernesga, que recorre la ciudad por el oeste, y el Torío, que la delimita por el este, situándose la mayor parte del núcleo urbano entre los dos cauces. A su paso por la ciudad, se encuentran canalizados y adecuados para el paseante, con jardines y paseos peatonales. La confluencia de ambos se sitúa a la altura del polígono de La Lastra, donde el Torío vierte sus aguas en el Bernesga.
Sobre el río, y en el centro de la ciudad, se encuentra el Aula de Interpretación de las Energías Renovables de León, perteneciente al Ayuntamiento de León. Es un aula destinada a enseñar a sus visitantes las soluciones complementarias y alternativas que proporcionan las energías renovables al sistema energético actual, pretendiendo ser un referente en ese aspecto en la comunidad autónoma de Castilla y León.
Se trata de un edificio situado en los márgenes del río Bernesga junto al Puente de los Leones, construido tras un acuerdo alcanzado por el EREN y el Ayuntamiento de León. El Aula posee un espacio de exposiciones sobre el medio ambiente y cuenta con una instalación solar térmica, una instalación solar fotovoltaica y una minicentral hidroeléctrica. La electricidad generada por estas tres últimas se incorpora a la red eléctrica general para su posterior utilización, siendo capaz de dar luz a 1.100 familias.
- Clima: El clima de León es mediterráneo continentalizado, si bien está algo suavizado en los veranos por la cercanía a la cordillera Cantábrica.
Las precipitaciones están repartidas, como es habitual en el clima mediterráneo continental, de forma muy irregular a lo largo del año, con mínimos en la época estival y máximos durante primavera y otoño. La precipitación media anual es de 556 mm. La ciudad disfruta al año de 2624 horas de sol al año y de 78 de lluvia, además de 16 de tormenta.
Las temperaturas son frescas, con una media anual de 10,9 °C, con inviernos fríos, siendo frecuentes las heladas (74 días de helada de media al año). La nieve hace acto de presencia en la capital leonesa durante 16 días de media al año, si bien las grandes nevadas no son frecuentes salvo en fechas como diciembre de 2009, cuando la ciudad y parte de la provincia se colapsaron debido a un temporal de frío y nieve durante el cual se registraron temperaturas mínimas históricas en algunos lugares y obligó a la UME a intervenir para hacer frente a las complicaciones derivadas del mismo. El verano es caluroso, suavizado por la altitud de la ciudad, con temperaturas máximas que rondan los 27 °C.
León sigue el desarrollo del tiempo atmosférico con un observatorio de la Agencia Estatal de Meteorología ubicado en el aeropuerto de La Virgen del Camino.
HISTORIA
- Edad Antigua: La ciudad de León surge hacia 29 a. C. como campamento militar romano de la Legio VI Victrix, en la terraza fluvial entre los ríos Bernesga y Torío, cerca de la ciudad astur de Lancia, con motivo de las llamadas Guerras Cántabras. A finales del siglo I, a partir de 74, el campamento es ocupado por la Legio VII Gemina, fundada por Galba, la cual permanecerá en León hasta aproximadamente principios del siglo V. Fue la única legión asentada en Hispania hasta la caída del Imperio Romano de Occidente (476), por lo que durante todo este tiempo León fue la capital militar de la Península. La ciudad perteneció al Convento Asturicense, con capital en Asturica Augusta, el cual formó parte de la provincia Tarraconense hasta el siglo III, cuando, con la creación de la provincia de Gallaecia, fue integrado en ésta. El trazado campamental romano original aún puede observarse en la actualidad, puesto que se conservan gran parte de las murallas que lo rodeaban en los siglos III y IV. Por los restos arqueológicos se sabe que contaba con unas termas (con ruinas aún visibles bajo la catedral) e incluso un anfiteatro con capacidad para 5000 espectadores a extramuros, actualmente enterrado bajo la calle Cascalerías. Alrededor del campamento fue creándose un núcleo civil paralelo, la cannaba, en la que se asentaban todas las personas que se encargaban de cubrir las necesidades de los soldados.
- Edad Media:
. De la caída de Roma al reino de Asturias: Tras el período romano, la ciudad formó parte del Reino suevo y posteriormente del Reino visigodo. Entre los siglos VI y VIII la escasez de evidencias arqueológicas proyectan una imagen carente de vitalidad urbana, con una clara reducción del espacio habitado, pero el descubrimiento de cerámicas adscribibles al periodo omeya cordobés en la zona de Puerta Obispo nos indica que la ciudad no fue abandonada completamente, sino que conservó cierta población estable.
León fue conquistada por el Califato Omeya en el año 712. No obstante, no fue hasta alrededor de 846 cuando un grupo de mozárabes intentó repoblar la ciudad con población cristiana, ya que hasta entonces esta había permanecido en "estado latente", en el centro de la línea de combates; sin embargo, un ataque omeya acabó con aquella iniciativa. Fue en 853 cuando Ordoño I incorporó la ciudad al Reino de Asturias, repoblándola con éxito. Es con Ordoño II, que ocupó el trono tras la muerte de su hermano García I, cuando la ciudad se convierte en capital del reino astur, iniciando el Reino de León.
. Reino de León: Durante la existencia del reino, la ciudad de León fue creciendo y evolucionando en su desarrollo. En esta cuestión jugó un destacado papel el Camino de Santiago, quizás la más importante vía de circulación de gentes, ideas, cultura y arte del Medievo.
En el siglo XII, el geógrafo y viajero árabe Edrisi escribió lo siguiente sobre León: "Allí se practica un comercio muy provechoso. Sus habitantes son ahorradores y prudentes". Tenemos también noticia de León a través de diversos códices, entre ellos el Codex Calixtinus, manuscrito que, entre otras cosas, contiene información sobre la ruta que los peregrinos seguían hacia Santiago de Compostela. Con todo ello, la ciudad conoció el desarrollo de nuevos barrios, en ocasiones extramuros de una ciudad que ya se quedaba pequeña, y casi siempre a la vera del camino de los peregrinos, que accedían a la ciudad por la llamada Puerta Moneda.
La ciudad de León fue sede regia desde la fundación del reino con García I, a principios del siglo X, hasta la unión con Castilla en 1230, momento en que la capitalidad del reino unificado fue itinerante. En el siglo X destacarían reyes como Ordoño II, que fijó la capitalidad y consagró la primera catedral en las antiguas termas romanas (bajo la actual catedral), y su hijo Ramiro II, que construyó el primer palacio en Palat de Rey y llevó a cabo victoriosas campañas contra los musulmanes, al igual que su padre. La segunda mitad del siglo es de luchas civiles en León, reyes débiles con problemas con la nobleza, y de ataques y contraataques musulmanes a la ciudad, incluyendo uno de Almanzor, que causó graves destrozos. La recuperación y reordenamiento de la capital llegó con Alfonso V a inicios del siglo XI, así como el comienzo de la victoria cristiana en la península. Avanzado el siglo, hay un cambio de dinastía, destacando a Fernando I como rey iniciador de la basílica de San Isidoro y de su panteón real. Su sucesor Alfonso VI pasó a los anales de historia por el avance en la reconquista y, sobre todo, por su relación política con el Cid. En el siglo XII, y tras el paso de la primera reina, Urraca I, destaca su hijo Alfonso VII, que avanzó notablemente la reconquista y llegó a coronarse emperador de toda Hispania en la antigua catedral leonesa. A su muerte, dividió los reinos de León y Castilla entre sus hijos; Fernando II reinó en León, destacando la reconquista de Extremadura. Su sucesor y último rey privativo de León fue Alfonso IX, que convocó las primeras cortes de Europa, con participación de todos los estamentos sociales, en la basílica de San Isidoro en 1188. A su muerte, en 1230, la corona leonesa y la castellana recaen en un mismo cetro, Fernando III el Santo, perdiendo León la capitalidad fija. En el siglo XIII la ciudad aún tuvo gran prosperidad comercial y crecimiento. A mediados de siglo, Alfonso X el Sabio ordenó el derribo de la vieja catedral y la construcción de la actual, de estilo gótico.
- Baja Edad Media: Durante el siglo XIV, León experimentó una crisis económica que vino acentuada por una serie de acontecimientos climáticos en toda Europa que mermaron las cosechas, produciendo hambrunas y endeudamiento de los campesinos. Estas circunstancias fueron agravadas con la llegada de la peste a León entre los años 1349 y 1350, la cual provocó una gran mortandad en la zona, despoblando pueblos y mermando, según fuentes de la época, en más de un cuarto la población de la zona. A esta serie de fatalidades se le unieron una inestabilidad política en toda la Corona castellana que produjo continuas tensiones que a menudo desembocaron en conflictos armados.
Con la llegada del Siglo XV, las cosas comenzaron a mejorar, observándose un incremento notable en la población en la edificación de nuevas casas, reconstrucción de las anteriores y ensanche de los arrabales. Se hablaba en estos años de hacer una cerca que comprendiese el arrabal de la parte oriental de la ciudad, abarcando las iglesias de San Lorenzo, San Pedro de los Huertos y San Salvador del Nido de la Cigüeña. Así, la ciudad de León, a finales de siglo, contaba con una población entre los cuatro y cinco mil habitantes.
- Edad Moderna: En el siglo XVI, la Guerra de las Comunidades contra Carlos I en León destacó por un insólito fervor comunero en el cabildo catedralicio y en los barrios extramuros. En la órbita local, las dos familias dominantes de aquella época, los Guzmanes, por parte de los comuneros, y los Quiñones, por parte del rey, hicieron de la guerra la excusa perfecta para resolver sus diferencias.
En los siglos XVII y XVIII, León vivió un estancamiento de su población, similar al de las ciudades de la meseta Norte. En estos años, el incremento poblacional en la ciudad no se debió a un incremento de la actividad industrial o comercial, sino al empuje de la agricultura de las zonas rurales que rodeaban la ciudad. Es por ello que la ciudad, con 5.500 habitantes, era, junto con Zamora, una de las ciudades menos pobladas de la meseta norte. Solo a finales del siglo XVIII, la Ilustración le dio algo de empuje a la ciudad, con la construcción de nuevas fuentes y equipamiento público, y la creación de una de las Sociedades Económicas de Amigos del País en la ciudad.
- Edad Contemporánea:
. Siglo XIX: En los días previos al estallido de la Guerra de la Independencia, en concreto el 24 de abril de 1808, tuvo lugar en León, al mismo tiempo que una serie de incidentes acaecidos en otras ciudades españolas como Burgos, Toledo o Madrid, una manifestación popular en favor de Fernando VII ante el miedo de que Carlos IV, el cual contaba con el favor de los franceses, volviera a reinar, suponiendo, por tanto, un rechazo a Napoleón. El 26 de julio de ese mismo año la ciudad caería ante el general galo Jean-Baptiste Bessières. Retomado su dominio en junio de 1812, sólo volvió a manos francesas durante un breve período en 1813, pero acto seguido los franceses se replegaron totalmente, volviendo la ciudad a la normalidad.
En 1833 la ciudad adquirió el rango de capital de su provincia, la cual formaría parte, junto a Zamora y Salamanca, de la Región de León.
Entre finales de siglo y principios del XX, el desarrollo de la minería del carbón la convirtió en nudo comercial y de comunicaciones fundamental en todo el noroeste, con el desarrollo de diversas infraestructuras, entre las que destacan la construcción de su estación de ferrocarril (luego propiedad de Renfe y hoy, de Adif) para vías de Ancho Ibérico, y el trazado de una línea de Ferrocarril de vía estrecha, conocida como El hullero, que, desde León, conectaba las principales zonas de extracción carbonífera con el núcleo industrial de Bilbao.
. Siglo XX: En 1904 se aprobó un Plan de Ensanche que tenía como eje principal la Gran Vía de San Marcos, la cual confluía en la Plaza de Santo Domingo. La Avenida Ordoño II unía esta plaza con la de Guzmán el Bueno, encargada de distribuir el tráfico de la estación de ferrocarril por las calles de Roma y República Argentina. A partir de estos grandes ejes se delimitaron manzanas de 100 metros de lado y una hectárea de superficie, solo variadas al noreste para conectar con el casco antiguo.
. Guerra Civil y dictadura franquista: Tras la sublevación de julio de 1936, la mayor parte de la provincia quedó en manos de los sublevados. En León, la sublevación de la guarnición tuvo lugar el 20 de julio, una vez que la columna minera, que desde Asturias se dirigía a Madrid, hubo dejado la ciudad. La resistencia fue escasa y los cargos públicos del Frente Popular, entre ellos el alcalde Miguel Castaño, fueron arrestados, condenados a muerte y ejecutados.
En los 60 y 70 la ciudad comenzó a crecer, auspiciada por el auge de la minería y la industria. Esto originó una expansión urbana anárquica en todas direcciones. La creación de barrios como San Mamés, San Esteban o El Ejido respondieron a esta expansión, que no solo se centró en la capital, sino que inició la andadura del Área metropolitana de León, con el desarrollo de pueblos como San Andrés del Rabanedo.
. Etapa democrática: En 1979 se celebraron de nuevo elecciones democráticas en la ciudad de León, en las que se hizo con el triunfo el PSOE por un error de conteo de los votos, siendo finalmente el verdadero ganador el UCD, con Juan Morano a la cabeza, que gobernó hasta 1987. En este año se produjo el "Pacto Cívico", impulsado por José Luis Díez Villarig, por el cual sacó del gobierno a Juan Morano durante dos años, tras los cuales volvería al gobierno municipal por el PP, gobernando hasta 1995. Le sucedió en ese año Mario Amilivia, que gobernó ocho años, hasta 2003, logrando en su primer mandato, el del 1995, la primera y única mayoría absoluta que ha existido en el Ayuntamiento de León hasta las elecciones municipales de mayo de 2011.
Paralelo al desarrollo de estos actos, renació el leonesismo, movimiento cultural del siglo XIX recuperado para la reivindicación política, produciéndose la aprobación de mociones en favor de una autonomía leonesa por parte de municipios y la Diputación Provincial de León en 1983, así como manifestaciones en favor de la autonomía leonesa, con 20.000 personas en 1983 y 90.000 en 1984.
En la década de los noventa la ciudad inició su despegue definitivo, acentuándose con el inicio del nuevo siglo; barrios como Eras de Renueva, Pinilla, La Lastra o La Torre ampliaron aún más el núcleo urbano, el cual también ha visto levantarse singulares ejemplos de arquitectura moderna, como el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León o el Auditorio Ciudad de León. En estos años el Área metropolitana dio un salto cualitativo, con nuevos planes urbanísticos que determinaron un gran área entre Villadangos del Páramo y Mansilla de las Mulas.
. Siglo XXI: En las elecciones de 2003, el Partido Popular no logró la mayoría y, a diferencia de lo ocurrido en 1999, año en el que pactó con Unión del Pueblo Leonés, este partido decidió dar su apoyo a Francisco Fernández, del PSOE. El PSOE duraría un año en el gobierno municipal, pues una moción de censura y la ruptura del grupo municipal leonesista haría que Amilivia recuperase la alcaldía hasta 2007.52 En las elecciones de dicho año, el PSOE consiguió por primera vez en la historia de la democracia el mayor número de votos en las elecciones, no llegando aun así a la mayoría absoluta, teniendo que pactar con UPL.53 Desde el 2011 gobierna el Partido Popular con mayoría absoluta y el alcalde es Emilio Gutiérrez.
ECONOMÍA
- Historia económica: Una vez fue establecido el campamento romano en torno a los años 74-75, este se encargó del control, gestión y explotación de las minas de oro, de las cuales la más importante era la de Las Médulas. Su actividad atrajo a población civil que se asentó alrededor del campamento para satisfacer las necesidades de los soldados, asentándose en el recinto civil canabae, que desarrollaba actividades como la artesanía o el comercio, que evolucionaron para no dar servicio tan solo a la legión sino también a la creciente población civil, crecimiento que atestigua la presencia de unas termas, de uso militar y civil.
Con la caída del Imperio romano, León entró en decadencia, el comercio y la artesanía pasaron a ser testimoniales y la población se redujo en gran medida, razón por la cual la ciudad pasó a ser un centro agrícola de poca importancia y un lugar de paso para los ganaderos de la zona. Con la llegada de los árabes, la ciudad se despobló definitivamente, sirviendo sus murallas como majada para los ganaderos de la zona.
No fue hasta el año 856 en el que Ordoño I repuebla la ciudad y reconstruye sus murallas, reactivando el comercio y la artesanía en la ciudad. Sin embargo el verdadero impulso lo dio Ordoño II al convertir a León en capital de su reino, haciendo que esta se convirtiera en uno de los principales centros urbanos de la España cristiana. Los avatares políticos fueron quitando protagonismo a León a lo largo de la historia, culminando esta pérdida de protagonismo en la unión definitiva con Castilla en el año 1230. Pese a ello, muchas de las instituciones del reino tuvieron continuidad después de esta unión.
Las malas comunicaciones con el resto del país hicieron que la ciudad mantuviese un aspecto rural y una población estable hasta comienzos del siglo XX. Es en ese siglo, cuando la ciudad inició una recuperación económica. Su condición de capital de provincia, y por ende, de centro urbano de referencia de la zona, así como la llegada del ferrocarril hizo que la ciudad se expandiera en todas direcciones con el ensanche y los barrios periféricos. La industria se asentó en un primer momento en los alrededores de la estación de ferrocarril desplazándose más tarde hacia el extrarradio y luego hacia los polígonos industriales habilitados en torno a la ciudad; no obstante la importancia de este sector nunca llegó a ser relevante en la estructura económica de la ciudad, en la que pesa más el sector servicios.
Durante la primera década del siglo XXI, la ciudad está viviendo una reactivación del sector industrial, motivado por su promoción como centro de transportes del noroeste con el aeropuerto y con las nuevas vías de alta capacidad, reactivación que se ve acompañada por el crecimiento de sectores económicos relacionados con el I+D. La ciudad no obstante, mantiene la lacra de la emigración de los jóvenes por la falta de trabajo en ciertos sectores, que sin embargo en términos globales está siendo amortizada por la inmigración y la reducción progresiva de esta emigración.
- Estructura económica: El sector primario en León se encuentra en vías de desaparición por la presión urbanizadora que la ciudad ejerce sobre los terrenos agrícolas todavía disponibles. No obstante, aún quedan remanentes de este antaño importante sector económico para la ciudad, en las vegas de los ríos Torío y Bernesga y en el alfoz, consistentes sobre todo en una modesta cabaña ganadera que hace uso de los pastos que rodean la ciudad y en pequeñas plantaciones de cultivos cerealistas, como la cebada y el trigo.
Es importante también citar la silvicultura, que se centra en las riberas de los ríos y utiliza el chopo, por su condición de especie de rápido crecimiento y aceptable calidad maderera. Por el contrario, la presencia de la acuicultura y la pesca es despreciable, en cuanto que de la primera apenas existen empresas y la actividad pesquera se centra solamente en la pesca deportiva en los ríos cercanos.
El sector secundario leonés se caracteriza por su debilidad y por inexistencia de grandes empresas que generen un entramado empresarial a su alrededor, basándose pues en pequeñas y medianas empresas. Los sectores en los que tradicionalmente se ha basado el entramado industrial de la ciudad son la metalúrgica de transformados metálicos, la industria química, de maquinaria, alimentaria, cerámica, del vidrio, del papel y artes gráficas y el textil. Es reseñable que la mayoría de las industrias de la ciudad se encuentran ubicadas fuera del término municipal de la ciudad, ubicadas en polígonos industriales que en su mayoría se encuentran conurbados con la ciudad.
Desde comienzos del siglo XXI y a consecuencia de la apertura de las grandes infraestructuras leonesas, tales como la A-66, la AP-71, la A-231 y el aeropuerto de León, inaugurado en 1999, la ciudad está experimentado cierto auge industrial, palpable en un aumento del suelo industrial disponible en el área metropolitana y en menor medida en el propio término municipal de León. La reactivación ha afectado también a las actividades relacionadas con la innovación y el desarrollo tecnológico, que tras el apoyo de las administraciones públicas con la implantación en la ciudad de varios centros tecnológicos como el Inteco y el superordenador Caléndula, perteneciente a la fundación de supercomputación de Castilla y León, además de la colaboración de la universidad con el impulso del sector, ha experimentado un desarrollo, con la llegada de varias empresas importantes del sector, como Hewlett-Packard, SAP, Telvent o Indra, entre otras.
El sector servicios leonés se encuentra diversificado, como corresponde a un centro urbano de cierta entidad, de este modo, la ciudad es el centro de referencia comercial de la provincia. Así, la ciudad cuenta con un sector comercial basado en su mayoría en un comercio tradicional, complementado en los últimos años con la apertura de grandes y medianas superficies en la ciudad, tales como Carrefour, El Corte Inglés, el E.Leclerc, Mercadona, entre otras, así como de centros comerciales, como Espacio León y León Plaza.
El turismo es también un factor clave en el sector servicios de la ciudad, pues la ciudad es visitada anualmente por más de 600.000 personas, animados por la presencia en la capital de un gran patrimonio monumental y de bellos espacios naturales en las inmediaciones de esta, así como de varias fiestas de gran afluencia y reconocido prestigio, entre las que sobresale la Semana Santa.
La Cámara Oficial de Comercio e Industria de León está presente en la ciudad desde el año 1907 por iniciativa de un grupo de comerciantes e industriales de la ciudad. Con sede en un edificio modernista de la avenida Padre Isla de la ciudad, la cámara se encarga de representar y defender los intereses generales del comercio y la industria de la provincia de León.
ARQUITECTURA Y MONUMENTOS
- Catedral de Santa María: Templo gótico dedicado a Santa María, fue comenzada a construir en el reinado de Alfonso X el Sabio a mediados del siglo XIII sobre la antigua catedral románica, que a su vez ocupaba los terrenos del Palacio Real que cediera Ordoño II para ello y que, a su vez, se asentaba sobre las termas romanas. De planta similar a la catedral francesa de Reims, tiene reducida su planta en 1/3 con respecto a ésta. Una característica peculiar es que las torres aparecen separadas de la nave central mediante arbotantes. Su planta es de tres naves, con bóveda de crucería. Trabajaron en ella distintos arquitectos como el Maestro Simón, el Maestro Enrique y Juan Pérez (estos dos empleados por entonces también en la Catedral de Burgos) y el Maestro Jusquín. El cuerpo principal del edificio fue terminado a principios del siglo XIV junto al claustro y la torre norte, mientras que la torre sur fue terminada en el siglo XV, en estilo gótico flamígero. En los siglos XVII y XVIII sufrió modificaciones estéticas por parte de Juan de Náveda y Joaquín de Churriguera, elementos que provocaron daños al edificio y fueron retirados en el siglo XIX por Matías Laviña, Juan Madrazo, Demetrio de los Ríos, Juan Bautista Lázaro y Juan Crisóstomo Torbado, muchos de los cuales llevaron a cabo la intensa restauración decimonónica que salvó el templo de la ruina, además de devolverle su esencia gótica original. Lo más impresionante es su interior, destancando los más de 1.800 metros cuadrados de vidrieras de los siglos XIII al XVI, incluyendo tres grandes rosetones y vidrieras en la parte baja y el triforio, algunas de ellas añadidas en las restauraciones del siglo XIX.
- Basílica de San Isidoro: Constituye uno de los ejemplos de arte románico más importantes de España y, sin duda, uno de los conjuntos más completos en este estilo, por cuanto que en él confluyen arquitectura, escultura y pintura, albergando en esta última técnica el Panteón Real, llamado por los expertos Capilla Sixtina del Arte Románico. Impulsada su construcción por los reyes Fernando I y su esposa Doña Sancha en el siglo XI, originariamente fue un monasterio dedicado a San Juan Bautista, y se supone que anteriormente se asentaba en sus cimientos un templo romano. Con la muerte de San Isidoro, obispo de Sevilla, y con el traslado de sus restos a León, se cambió la titularidad del edificio. Albergó las primeras Cortes de la historia, las Cortes de León, celebradas en 1188.
- Antiguo Convento de San Marcos: Impulsada su construcción por los Reyes Católicos como sede de la Orden de Caballería de Santiago, puesto que de hecho fue erigido a orillas del río Bernesga y literalmente junto al puente medieval de San Marcos, por el que los peregrinos continuaban el Camino de Santiago, es hoy uno de los monumentos más importantes de León. De estilo plateresco, en su construcción participaron Juan de Orozco, que firmó los planos de la iglesia, Martín de Villarreal, autor de la fachada, y Juan de Badajoz, a quien se debe el claustro y la sacristía. En el siglo XVIII se contruyó el ala izquierda del edificio, respetando su arquitectura plateresca. Su historia ha estado llena de avatares y su uso original no duró mucho: tras ello ha sido cárcel (en ella encerró el Conde-Duque de Olivares a Francisco de Quevedo), cuartel, sede de los estudios veterinarios, origen de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León y del Instituto General y Técnico (uno de los tres primeros Institutos de Enseñanza Media creados en España por ley de 1845), fundado en 1846 (hoy IES Padre Isla), e incluso fue campo de concentración durante la Guerra Civil. Actualmente es un parador de cinco estrellas.
- Casa Botines:Obra de Antonio Gaudí, de estilo neogótico. Es de planta trapezoidal, flanqueada por cuatro torres rematadas en pináculos. Las ventanas tienen su inspiración en las ventanas del triforio de la catedral leonesa. En la portada hay una talla de San Jorge matando al dragón. El edificio fue concebido para el negocio de tejido en su planta baja y semisótano, destinándose las cuatro plantas restantes a viviendas de renta.
La construcción del edificio se debió a la iniciativa de unos comerciantes de tejidos de León, Simón Fernández Fernández y Mariano Andrés Luna, que estaban relacionados con industriales textiles catalanes, uno de los cuales, Eusebi Güell, recomendó a Gaudí como arquitecto para diseñar la nueva sede del negocio en la capital leonesa, ya que por entonces estaba construyendo cerca de León el Palacio Episcopal de Astorga. Gaudí delegó la dirección de las obras en el constructor Claudi Alsina i Bonafont, uno de sus ayudantes en varias obras en Barcelona, y contó con la colaboración de varios albañiles y artesanos catalanes.
- Palacio de los Guzmanes: Mandado construir por Juan Quiñones y Guzmán, obispo de Calahorra, se comenzó la obra en 1560 bajo la dirección de Rodrigo Gil de Hontañón. El edificio fue adquirido por la Diputación Provincial de León en 1882, teniendo ampliaciones en los años 1973 a 1976 por parte del arquitecto Felipe Moreno. De forma trapezoidal, los dos primeros cuerpos tienen vanos protegidos por rejería, siendo los balcones del superior adintelados, y el tercer cuerpo presenta una galería o paseador con arquillos entre pilastras corintias y gárgolas de grandes dimensiones. Tiene dos puertas del siglo XVI, una de ellas con una estructura de dos columnas jónicas, flanqueadas por dos soldados con los escudos de armas de la familia.
- Palacio del Conde Luna: Del Palacio del Conde Luna, del siglo XIV, se conserva el cuerpo central de la fachada. Está construido de piedra sillería y tiene cerca de once metros de ancho. La portada es gótica con dintel sobre modillones, un gran arco apuntado cobija el tímpano, y se encuadra en ancho molduraje. Se conserva también uno de los grandes torreones, de finales del siglo XVI. El edificio ha tenido diversos usos a través de la historia, además de su función original de residencia de los condes de Luna, como el ser sede del Tribunal de la Inquisición de la ciudad y vivienda particular, entre otros. Cedido al Ayuntamiento por la Fundación Octavio Álvarez Carballo, alberga la sede española de la Universidad de Washington así como la sede de la Fundación León Real.
- Plaza Mayor: La Plaza Mayor, ubicada en el corazón del casco antiguo, fue finalizada en 1677 según planos de Francisco del Piñal siguiendo el ejemplo de otras plazas mayores españolas, en particular la de Madrid. El edificio del Consistorio que preside la plaza es de estilo barroco y fue diseñado por el propio Francisco del Piñal.
- Antiguo Consistorio: Construido a finales del siglo XVI por Juan de Rivero para ser la sede del gobierno municipal, es de estilo renacentista y consta de tres alas y una escalera interior.
- Iglesia de Palat del Rey: La Iglesia de San Salvador de Palat del Rey, templo más antiguo de León, fue fundada en el siglo X y, como su nombre indica, se trata del templo del "Palat" (el Palacio) del Rey. De su pasado como oratorio regio de la monarquía leonesa da buena cuenta la propia elección de la dedicación, San Salvador, recordando al templo mayor ovetense, o su uso como panteón de la monarquía, antes de la construcción del que sería el gran mausoleo isidoriano. Del templo original, prerrománico, pueden apreciarse hoy pocos restos, aunque ha sido recientemente restaurada y musealizada.
- La Iglesia de Nuestra Señora del Mercado: es una iglesia con planta basilical en forma de sepulcro, siendo más estrecha a los pies. Presenta una portada románica de arco ciego, dos ábsides también románicos decorados con bóveda de horno, capiteles y líneas de imposta con taqueado jaqués. Los pies del edificio se cierran con bóveda de crucería. La torre es obra de Felipe de Cajiga (1598), habiendo sido rematada por Fernando de Compostiza.
- Arco de la Cárcel o Puerta Castillo: Arco que desde tiempos romanos era una de las puertas de entrada a la ciudad. Se situaba junto a una fortaleza que se conservó en la Edad Media. Actualmente, la fortaleza o castillo -sede del AHP de León- aún es visible, mientras que el arco de entrada fue reconstruido en el siglo XVIII. Está presidido por una estatua dedicada a Pelayo y es la única puerta de entrada a la ciudad que se conserva.
- Palacio de los marqueses de Prado: Se trata de un palacio de estilo barroco del siglo XVII que albergaba la residencia de los marqueses de Prado, señores de Valdetuéjar. Actualmente es el Hospital de Regla. Presenta una fachada barroca en la que se repiten los blasones de los Prado.
- Palacio medieval: Embutido en el patio del colegio de las Teresianas se halla el único edificio civil del siglo XII de la ciudad. De planta cuadrada en ruinas, en una cara conserva puerta y ventanas románicas y una escalera interior de caracol. Se desconoce el servicio que se le dio en la Edad Media.
- Palacio del marqués de Torreblanca: Construido en el siglo XVII, consta de grandes dimensiones, planta cuadrada y patio interior, y su fachada está recubierta de ladrillo ornamental. Actualmente es la sede del Recreo Industrial.
- Antiguo Edificio de Correos: Edificado en la primera década del siglo XX por el arquitecto leonés Manuel de Cárdenas, su estilo arquitéctónico trata de no romper la armonía gótica catedralicia. Se observan también influencias de Gaudí en un edificio de gusto neogótico.
- Palacio de Don Gutierre: El edificio actual data del siglo XVII y aún conserva el blasón de esta familia, descendientes del emperador Alfonso VII y de Guzmán el Bueno.
- Iglesia de San Marcelo: De lo que fuera la iglesia dedicada al centurión romano Marcelo no queda más que una portada gótica. El templo actual es de estilo herreriano, terminado a principios del siglo XVII. Del exterior destaca la torre cuadrada de la iglesia, cubierta de característicos ladrillos, que se asoma a la plaza de Santo Domingo.
- Casa de las Carnicerías: Situada en pleno corazón del Barrio Húmedo, se inició en estilo renacentista a finales del siglo XVI. La fachada, de corte clásico, consta de dos pisos. Actualmente está dedicado a oficinas bancarias.
- Capilla del Cristo de la Victoria: De estilo neorrománico, fue realizada a finales del siglo XIX por Demetrio de los Ríos, uno de los restauradores principales de la Catedral de León. La portada imita la puerta del Perdón de la Basílica de San Isidoro de León. En su interior se conserva una escultura gótica del cruficado.
- Convento de las Concepcionistas: El Convento de las Concepcionistas, fundado en 1512 por Leonor de Quiñones, presenta una portada románica del antiguo edificio y corredores con pinturas mudéjares. Su iglesia es de una sola nave, con cabecero del siglo XVI, obra de Juan del Ribero. Se conservan en su interior mobiliario artístico, retablos barrocos, pintura y orfebrería.
Palacio Episcopal: Su construcción comenzó en el siglo XVIII pero no se vio totalmente terminado hasta 1936. Durante años fue la residencia oficial del obispo de León. Posee una estructura cuadrada con un patio en el centro.
- Judería de Puente Castro: Destacable es también el Castrum Iudeorum. Los primeros testimonios de presencia judía en la ciudad de León se remontan al siglo X; entonces se documenta la existencia de una próspera comunidad hebraica asentada en el cerro de la Mota, cercana a la actual pedanía de Puente Castro, sobre el curso del río Torío y a la vera del Camino de Santiago, circunstancia ésta que favoreció su tradicional dedicación a actividades vinculadas al comercio y la banca. Sin embargo, tras el ataque que la aljama sufrió en el siglo XII a manos del rey de Castilla, sus moradores fueron obligados a abandonarla y asentarse en la ciudad de León, donde crearon un nueva aljama. En la actualidad, se están llevando a cabo una serie de investigaciones y estudios arqueológicos en torno a este yacimiento, dirigidas desde los departamentos de Historia y Patrimonio de la Universidad de León por Jorge Sánchez-Lafuente Pérez y José Luis Avello Álvarez.
- Murallas: La muralla de León tiene su origen en una primera fortificación militar de época augustea, en torno al siglo I a. C., y consistía en dos muros paralelos de madera rematados por un parapeto y que estaban unidos por un entarimado. Pronto fueron sustituidas por unas construidas en piedra por la Legio VII en torno al siglo I, cuyos restos aún son visibles en la zona de San Isidoro. En torno a los siglos III y IV, se construyeron las que pueden contemplarse hoy en día. Declarada Monumento Histórico Artístico en junio de 1931, aún quedan en pie muestras que encerraban el recinto de la ciudad en un cuadrilátero que fue rodeado de construcciones y más tarde deformado en las restauraciones de Alfonso V y Alfonso IX, con apertura de nuevas entradas a la ciudad. Están regularmente conservadas desde la torre llamada de los Ponces (de origen también romano) hasta Puerta Castillo, y desde aquí hasta la torre de San Isidoro, en total casi la mitad del recinto, aunque con desigual estado de conservación. Se está procediendo actualmente a su restauración.
En cuanto a las cercas medievales, su origen data del siglo X, y fueron construidas para proteger la expansión de la ciudad extramuros de la muralla romana, que en la época romana se denominaba cannaba y que daría lugar al actual Barrio Húmedo. Las actuales murallas datan del siglo XIV y se conservan dos trazados importantes. En medio de su trazado se conserva parcialmente Puerta Moneda, antigua entrada al barrio judío de la ciudad.
- Barrio Húmedo: Por Barrio Húmedo se conoce al distrito situado en el viejo León, una zona que abarca los alrededores de la Plaza Mayor y de la Plaza de San Martín o de las Tiendas, a la que van a desembocar un total de siete calles. Esta plaza fue el lugar en torno al cual se concentraban los artesanos, mercaderes y peregrinos de la ciudad de León y que hoy, desaparecidas esas actividades o desplazadas a otros lugares de la ciudad, han sido sustituidas por actividades hoteleras y de esparcimiento.
Su atractivo está en que desde la calle La Rúa hasta la calle Caño Badillo, el paisaje urbano del Barrio Húmedo se llena de bares, cafés y mesones que convierten la zona en la mayor ruta del "tapeo" y en escaparate de las especialidades gastronómicas de la ciudad y de la provincia. Esta circunstancia, unida a la estrechez de sus calles y sus plazas, forman el espacio más típico de la ciudad, caracterizado por su trazado medieval con irregularidades urbanísticas y que es destino obligado para los turistas que visitan la ciudad. El 22 de mayo de 1995 se terminó su peatonalización.
El Barrio Húmedo cuenta también con varios edificios y entornos urbanos destacables; además de las citadas Plaza Mayor y Plaza de San Martín, se encuentra la Plaza del Grano, conocida por conservar su viejo empedrado de canto rodado, estar rodeada de los últimos vestigios de arquitectura tradicional leonesa que quedan en la ciudad y por la iglesia del Mercado. Además de esto, en el barrio se encuentran la casa de las Carnicerías, el palacio de Don Gutierre y el palacio del Conde Luna.
GASTRONOMÍA
La gastronomía de la ciudad es una composición de los diferentes platos típicos de la gastronomía provincial, adaptada al frío clima provincial mediante platos energéticamente ricos que permitían afrontar las tareas cotidianas durante los fríos inviernos leoneses.
El embutido es pieza clave en este aspecto, por lo que en la ciudad de León se pueden saborear productos como la cecina de León, la morcilla de León, el chorizo de León y el Botillo del Bierzo, entre otros. Platos de mayor consistencia como el cocido Maragato, la sopa de trucha, la trucha frita y fría y el lechazo asado también son muy relevantes en la gastronomía de la ciudad, compendio de la presente en el resto de la provincia. Todo ello sin olvidar los platos de legumbres y hortalizas provenientes de las huertas leonesas, tales como las alubias de La Bañeza, pimientos de El Bierzo y de Fresno de la Vega y puerros de Sahagún.
En la bebida, destacan los vinos, avalados por dos denominaciones de origen, Bierzo y Tierras de León. Acompañando a estos, la limonada es un producto muy típico que se bebe en Semana Santa, en la tradición de "matar judíos".
Sin embargo, las tapas son sin lugar a duda el mayor exponente de la gastronomía de la ciudad. Las tapas pueden ser de todo tipo, desde guisos y platos calientes pasando por fritos, arroces hasta la más ligera de platos fríos y sencillos. Una peculiaridad de la tapa leonesa es que se sirve gratuitamente junto a la bebida en cualquier bar de la ciudad, aunque sin duda el lugar donde el tapeo alcanza su máximo esplendor es en el Barrio Húmedo, donde la concentración de bares y el esmero de los propietarios de los mismos a la hora de preparar las tapas ha propiciado el ambiente idóneo para el tapeo.
En cuanto a la repostería, bebiendo en este caso también de la provincia, sobresalen las Mantecadas de Astorga, los Lazos de San Guillermo de Cistierna, los Imperiales de La Bañeza, los Nicanores de Boñar y las Rosquillas de San Froilán. Destaca también el arroz con leche y la leche frita.