BAR Y RESTAURANTE GRAN SOL DE HONDARRIBIA (GUIPÚZCOA)
- Dirección: Calle San Pedro, 63, 20280 Hondarribia, Guipúzcoa
- Localización: GPS N 43º 22′ 7.06″ W 1º 47′ 38.96″
- Recomendaciones: Es el bar con los mejores pintxos de Hondarribia y el que mejor ejemplifica el nivel culinario de la zona. Los pintxos calientes son excelentes, muy elaborados y con una sorprendente combinación de materias primas, y con un resultado original.
- Especialidades: El multipremiado huevo mollete con migas de pastor y caldo de ave, el insuperable Hondarribia (tosta de bacalao ahumado sobre foie y piquillo), el solicitado Jaizkibel (champiñón relleno de mousse de queso y jamón) y la tradicional croqueta de chipirón.
- Bueno para: Ambiente de bar, Cocina local.
- E-mail: info@bargransol.com
- Web: www.bargransol.com
- Precios: (3-4€/pintxo).
Gran Sol Taberna | Bixente Muñoz | San Pedro, 65 | 20280 Hondarribia | Tel (00 34) 943 642701
Martes a Domingo, 11:30-23:00 | Domingo, 11:30-22:30 | Lunes, cerrado salvo festivos
Cocina. Martes a Domingo mediodía, 12:30-15:30 - 19:30-23:00 | Domingo tarde, 19:30-22:30
Gran Sol Restaurante| Erika Medina | San Pedro, 63 | 20280 Hondarribia | Tel (00 34) 943 647075
Martes-Jueves, 13:00-15:30, cerrado Noches | Viernes-Sábado, 13:30-15:30-20:30-23:00
Domingo, 13:30-15:30, cerrado Noches | Lunes, cerrado salvo festivos
- Ubicación: El bar Gran Sol se encuentra en el barrio de La Marina en la calle San Pedro número 65 en la localidad de Hondarribia. Este es un antiguo barrio de pescadores y en la actualidad es el centro neurálgico de la ciudad. El lugar por excelencia para el ocio en la bella localidad guipuzcoana. El colorido de sus casas, las terrazas, el ambiente de los bares en zona peatonal los fines de semana le confieren un carácter especial.
. La calle San Pedro: Reúne a buena parte de los establecimientos de Hostelería de la ciudad. Terrazas y restaurantes, y un hervidero de gentes que se reúne en torno a los pintxos y la gastronomía para encontrarse, divertirse y disfrutar de los momentos de ocio.
. El barrio de la marina: Es precioso con sus casas blancas y maderas pintadas de bonitos y sus balcones llenos de flores.
. Hondarribia: es un lugar con un encanto especial. Una bahía de excepción. Un entorno natural privilegiado. Junto a ello, los paseos, la naturaleza, la historia, el Casco Antiguo y, sobre todo una importante cultura gastronomica. La ciudad en el enclave perfecto.
- Ambiente: El Gran Sol es un bar emblemático en Hondarribia. Un hervidero de gentes, una terraza repleta y una fiesta gastronómica. El ambiente es agradable y el trato del personal muy bueno.
- Filosofía: Fidelidad a la esencia de un bar de pintxos. Una cocina exigente, difícil en el día a día, pero atractiva como ninguna, ya que un bar pintxos exige agilidad, rapidez y atención a cada cliente. Lograr la satisfacción es un duro reto diario, es el propósito de cada día.
- Cocina: La materia prima, tanto carne, como el pescado y vegetales son de muy buena calidad. Destacar también que los pintxos calientes, están buenísimos. Te los preparan al momento y debido al notable éxito del local y lo elaborado de los pintxos más demandados les ha llevado a establecer un sistema de encargo, en el que te toman el nombre y luego te llaman por un altavoz. Un lugar para comer buena cocina en plato pequeño.
- Establecimiento: El local no es excesivamente grande, más bien pequeño para la afluencia de público, especialmente en verano. Nada más entrar vemos toda la pared de la barra decorada con los premios recibidos por sus pintxos, y se tarda bastante tiempo en contarlos. También hay un collage en la pared, ensamblando fotografías de Bixente Muñoz y sus afamados pintxos o cocina en miniatura.
- Equipo Humano:
. Bixente Muñoz: Dirige el bar, genera ideas, es el creativo, la pasión por la cocina.
. Mikel: Es el Jefe de Bar. Su misión es estar atento a cada detalle y conocedor de su clientela para que la experiencia de cada consumidor sea plenamente satisfactoria.
. Micaela Po: Es la Jefe de Cocina, siempre pendiente de la creatividad de Bixente Muñoz aportando el rigor y su carácter meticuloso para que cada pintxo sea un pintxo Gran Sol.
CARTA DE PINTXOS
La cocina en miniatura forma parte de la esencia del Gran Sol, de su cocina de emociones, de sus sabores, contrastes, matices, de recuerdos, tradiciones, de productos y preparados al momento. Hechos a conciencia.
Pintxiotos con corazón:
- Foie con queso caramelizado y reducción de mosto con Mostaza a la antigua
- Foie gras a la sartén con cabello de ángel y reducción de zumo de piña
- Hondarribia: tosta de bacalao ahumado con pimiento de piquillo, foie y dulce de melocotón
- Huevo mollete al oro sobre migas de pastor al chipirón y jugo de ave
- Jaizkibel: champiñón relleno de mousse de queso con jamón ibérico y ali oli
- Láminas de bacalao a la gallega y crema de setas a la albahaca
- Codito de cerdo con crema de puré de patatas y toque de caramelo
- Croquetas de jamón, roquefort, chipirón
Pequeños postres con cariño:
- Mousse de camomila con vainilla y frutos rojos
- Bocadito tibio de chocolate al ron con crema helado
HISOTRIA DEL PINTXO
Se llama pincho (pintxo en su grafía en euskera) a una pequeña rebanada de pan sobre la que se coloca una pequeña porción de comida. Recibe dicho nombre porque tradicionalmente se sujetaba la comida al pan con un palillo (aunque esta no sea una característica obligatoria). Es muy similar a una tapa.
- Costumbres asociadas: A diferencia de la tapa, que suele incluirse en algunos bares al pedir la bebida, el pincho se debe pedir por separado, y suele ser más grande. Los pinchos fríos son aquellos que generalmente están dispuestos sobre la barra del bar y el cliente los coge a voluntad o pide al camarero y luego, al terminar de comer, los paga. Los pinchos calientes deben ser pedidos al camarero, quien los solicita a cocina para ser preparados o calentados al momento.
El pincho está especialmente asociado a la gastronomía vasca, en la que se suele tomar como aperitivo acompañado normalmente de un vaso de vino tinto (llamado txikito) o un zurito, nombre por el que se conoce al pequeño vaso de cerveza de media caña, aproximadamente; este mismo vaso es conocido en Aragón como penalti, en La Rioja corto, y en otras zonas de España mini. Esta costumbre es muy común en los bares del País Vasco, Cantabria, Navarra, La Rioja, Asturias y en zonas de la provincia de Burgos como Miranda de Ebro. Dada la fama que está adquiriendo esta forma de comer, cada vez son más las personas que deciden realizar su comida o cena a base de pinchos, alternando de bar en bar.
Originalmente los ingredientes a colocar sobre el pan pueden ser prácticamente cualesquiera, pero muchas veces son los más habituales en la cocina vasca: pescados (especialmente merluza, bacalao, anchoas, gulas...), tortilla de patata, pimientos rellenos, croquetas, etc. Sin embargo, la abundancia de jóvenes cocineros en el País Vasco y en San Sebastián en particular, fruto de las escuelas de alta cocina y los restaurantes, está propiciando que muchos de ellos se dediquen a elaborar y crear nuevos y cada vez más complejos pinchos, lo que resulta en una constante innovación y aparición de nuevas recetas. Se da cada vez más una coexistencia entre los pinchos tradicionales y la cocina en miniatura.
Lo más habitual suele ser coger uno mismo el pincho, que se sitúa en bandejas sobre la barra del bar, y comerlo de pie mientras se charla con los amigos y se toma la bebida.
En algunos bares, a cada pincho le colocan un palillo diferente para, al final, contar los palillos que tiene cada cliente y así calcular la cuenta. El uso de palillos más largos o más cortos, o de palillos con capuchones de diferentes colores se da en algunos bares, aunque no es la norma general. De hecho hay una gran variedad de pinchos que, al no haber nada que sujetar, no llevan palillo. Además, en Vitoria-Gasteiz, San Sebastián y en Bilbao, los palillos suelen tirarse al suelo, cobrando el camarero en función de lo que el cliente dice que ha consumido.
- Txikiteo: El chiquiteo (a menudo escrito con grafía vasca, txikiteo) es la tradición de tomar chiquitos (txikitos), vasos pequeños de vino, yendo de bar en bar, en una zona limitada, con una cuadrilla de amigos y/o conocidos.
Además de tomarse unos vinos (generalmente acompañados por pintxos y tapas), el acto del chiquiteo da la oportunidad de desconectar de la rutina diaria y relacionarse socialmente. Esta actividad lúdica ha tenido una gran implantación en el País Vasco, Navarra, La Rioja, y más recientemente en Cantabria y en el norte de Burgos, además de otras regiones españolas.
No hay referencias escritas claras de cuándo comenzó esta tradición, pero va indisolublemente unida a la proliferación de bares en un espacio limitado. El País Vasco es una de las zonas donde más bares por persona hay de España, y por tanto de Europa. Al principio y durante muchos años fue una tradición totalmente masculina y las mujeres estaban vetadas. En los últimos años la mujer se incorpora al chiquiteo en buena medida, incluso saliendo en cuadrillas exclusivamente femeninas.