LA CRISIS Y EL VINO
En un sector como el del vino, en el que las crisis se suceden ajenas a la política mundial y en el que los bodegeros y viticultores están acostumbrados a pasar años muy malos incluso en épocas de bonanza.
Esta crisis afecta a todos, por supuesto, pero si se acompaña de una muy buena comercialización, expecialmente exportación del producto y unos precios razonables, todo se lleva mucho mejor.
Hay empresas afectadas por la crisis, es indudable, ya que siempre en estas coyunturas hay quien se queda en el camino y quien arrastra a otros en su caída. Es cierto que los concursos de acreedores están creciendo como la espuma, que muchas cooperativas y particulares han vendido su vino y no lo cobran, al igual que embotelladoras y comercializadoras que venden sus botellas de vinos y luego se las ven y se las desean para cobrarlas. Estamos en un momento en el que más que vender hay que intentar cobrar y aun encontrando siempre las más dignas salvedades, ya que son más las empresas que cumpen sus compromisos que las que no lo hacen, la situación económica afecta a todo el mundo.
Hoy día existen Jornadas Técnicas Vitivinícolas especializadas como: ¨El futuro del vino ante la crisis¨ que celebro Cooperativas Agro-alimentarias en mayo del 2010 en Ciudad Real como tema principal a tratar en sus Jornadas Técnicas Vitivinícolas anuales. Bajo el lema “El futuro del vino ante la crisis, el mercado y la OCM”, donde se analizó la situación y problemática actual de este sector, uno de los más castigados en las últimas campañas, con objeto de contribuir a que las bodegas cooperativas adopten estrategias que mejoren su posicionamiento en el mercado global, cada vez más amplio y competitivo, utilizando como herramientasprincipales la dimensión empresarial, el marketing y la comunicación.
En un sector como el del vino, en el que las crisis se suceden ajenas a la política mundial y en el que los bodegeros y viticultores están acostumbrados a pasar años muy malos incluso en épocas de bonanza.
Esta crisis afecta a todos, por supuesto, pero si se acompaña de una muy buena comercialización, expecialmente exportación del producto y unos precios razonables, todo se lleva mucho mejor.
Hay empresas afectadas por la crisis, es indudable, ya que siempre en estas coyunturas hay quien se queda en el camino y quien arrastra a otros en su caída. Es cierto que los concursos de acreedores están creciendo como la espuma, que muchas cooperativas y particulares han vendido su vino y no lo cobran, al igual que embotelladoras y comercializadoras que venden sus botellas de vinos y luego se las ven y se las desean para cobrarlas. Estamos en un momento en el que más que vender hay que intentar cobrar y aun encontrando siempre las más dignas salvedades, ya que son más las empresas que cumpen sus compromisos que las que no lo hacen, la situación económica afecta a todo el mundo.
Hoy día existen Jornadas Técnicas Vitivinícolas especializadas como: ¨El futuro del vino ante la crisis¨ que celebro Cooperativas Agro-alimentarias en mayo del 2010 en Ciudad Real como tema principal a tratar en sus Jornadas Técnicas Vitivinícolas anuales. Bajo el lema “El futuro del vino ante la crisis, el mercado y la OCM”, donde se analizó la situación y problemática actual de este sector, uno de los más castigados en las últimas campañas, con objeto de contribuir a que las bodegas cooperativas adopten estrategias que mejoren su posicionamiento en el mercado global, cada vez más amplio y competitivo, utilizando como herramientasprincipales la dimensión empresarial, el marketing y la comunicación.
En el tema del precio del vino supongo que a quien elabora el vino, no le resulta más barato que antes. Si se bajase el precio de los corchos, las etiquetas, las cápsulas, las cajas, las botellas, el transporte, la luz, los impuesto, el gasoil, etc. entonces quizas sí.
En algunos vinos sólo el vidrio vale más que algunos vinos de mesa, además del etiquetado, coste de la uva, marqueting, etc...