CADAQUÉS QUE VER Y HACER (TURISMO COSTA BRAVA)
Al recorrer las calles del casco antiguo nos encontraremos con un pueblo de origen medieval rodeado por una gran muralla. Llama mucho la atención algunas partes del antiguo pavimento hecho a mano con piedras extraídas de la orilla del mar.
La calle del Call, es una calle muy estrecha por la que pasear y disfrutar. La Iglesia de Sta. María, es uno de los monumentos principales y desde donde hay una vista preciosa del pueblo, de la bahía, de es Cucurucuc e incluso del faro de Cala Nans. Otros lugares de interés son la Casa Museo Salvador Dalí y el Parque Natural del cabo de Creuss.
Cadaqués es un municipio español de la comarca del Alto Ampurdán en la provincia de Gerona, Cataluña. Es el pueblo más oriental de la península ibérica. Su término municipal ocupa la mayor parte de la costa de levante del macizo del cabo de Creus.
Aislado por la montaña del Puig de Paní y el Puig de Bufadors del resto del Ampurdán, el pueblo pesquero de Cadaqués vivió de cara al mar y prácticamente separado, por tierra, del resto del Ampurdán, hasta finales del siglo XIX.
El origen del topónimo es "Cap de Quers" o "Cap d'Aques" que se traduce por 'Cabo de rocas'. Tradicionalmente dedicado a la pesca, en el siglo XIX fueron famosas las industrias de salazones que, aunque hoy en día no tienen la importancia que tuvieron en el pasado, suponen una parte de la economía local no dedicada al turismo, destacando entre sus productos las Anchoas de Cadaqués.
- Celebridades: A partir de 1958, Marcel Duchamp, el artista probablemente más influyente del siglo XX, fijó en Cadaqués su residencia veraniega. El pintor surrealista Salvador Dalí, cuya familia tenía en el pueblo la residencia veraniega, donde había estado de visita en su época de estudiante Federico García Lorca, volvió de Nueva York en 1948 y se instaló en Port Lligat una de las calas del término.
También atrajo Cadaqués a celebridades tan destacadas como Eugenio D'Ors que escribió sobre sus estancias veraniegas en el pueblo, Pablo Picasso, Marcel Duchamp, Joan Miró, Richard Hamilton, Albert Ràfols-Casamada. Cadaqués ha atraído a muchos otros pintores cuya lista sería muy extensa, como Antoni Pitxot, Rafael Durancamps, Gustavo Carbó Berthold, Maurice Boitel, Mauricio Sbarbaro o Joan-Josep Tharrats.
- Gastronomía: No te vayas de la ciudad sin probar la paella de marisco, la escorpena con salsa y patatas, el pagro, los erizos de mar, la langosta y en primavera los mejillones de roca. Dulces genuinos, como los “crespells” o las “flaonas”, de origen medieval.
Los “suquets”, platos típico que los pescadores cocinaban en sus barcos, recomendamos probarlos en alguno de los bares de playa o chiringuitos de Cadaqués. Se prepara en una cazuela catalana de hierro, y se pone, el pescado, las patatas y las hierbas en crudo todo junto con un chorrito de aceite de oliva virgen, sal y agua que lo cubra. Con una cocción alta y muy poco tiempo se realiza este delicioso plato. Se encuentra con, Bacalao, merluza, “clavellada”, y el mejor está realizado con el pescado de roca.
- Casa museo Salvador Dalí: Situada más concretamente en la bahía Portlligat (Cadaqués). Considerada una visita indispensable para conocer el universo del pintor, o para los amantes del arte surrealista y provocador. La entrada cuesta 11€ la normal, 8€ la reducida.
Es necesario, sobre todo en verano, llamar para poder concertar hora y día de visita (Tel 972 25 10 15). Te organizan grupos de máximo 10 personas y la visita dura media hora. La casa se conserva tal y como la utilizaban el genio y su esposa Gala.
En realidad la forman varias casas de pescadores que Dalí fue comprando entre 1930 y 1972. Se visitan los interiores, el patio, el olivar, y la piscina. Salvador Dalí vivió aquí durante una parte importante de su vida y obra, más de 50 años junto con Gala, su musa. En su taller se encuentran dos obras inacabadas. Dalí marchó al Castillo de Púbol tras morir Gala en 1982, y nunca volvió a Cadaqués.
Llama la atención al entrar unos agujeros en la pared a modo de ventanas rectangulares desde donde se contempla el mar y el puerto de esta población, estos singulares orificios dejan ver los colores del lugar que fueron los que inspiraban a Dalí en su valiosa inspiración pictórica, el color de Port Lligat es especial.
Ya en el interior de su casa decorada a gusto por el matrimonio Gala-Dalí se observa que no hay mas dormitorio que el suyo, esto era debido a que no querían que las visitas pernoctaran en la casa salvaguardando así su intimidad.
Con el surrealismo, su locura, sus cuadros, su bigote y su musa. La casa de este genio no iba a ser menos, desde el momento que cruzas la puerta de la casa, un oso polar auténtico te recibe en la entrada, después un esqueleto hecho con restos de tejas y barcas, una piscina llena de objetos extraños, muñecos de Michelín y carteles de Pirelli. También el dormitorio desde el cual veía los amaneceres que tanto le inspiraban, su biblioteca y por supuesto su taller en el que puede verse alguna obra del artista.
El surrealismo le rodeaba y así lo demuestra su casa, construida a lo largo del tiempo, comprando poco a poco las casas colindantes a los pescadores para crear ese intrincado laberinto donde dar rienda suelta a su imaginación. Destacan la sala donde pintaba, o el dormitorio, con un espejo para reflejar el sol del amanecer y convertirle en el primer peninsular en ver el nuevo día.
Dalí fue citado diciendo que el sol se levantaba sobre su cama antes que en cualquier otro lugar en España, ya que él ponía su cabeza hacia abajo hacia el punto más oriental de España. Ideó un sistema múltiple de espejos ingenioso para que los primeros rayos de sol de la mañana le dieran directamente en la casa.
- Port Lligat: Minúsculo núcleo de población situado en una pequeña y sencilla bahía. Situado en el municipio de Cadaqués es famoso por albergar la Casa-museo de Dalí, así como por ser su refugio durante muchos años. Lugar de entrañable calidez mediterránea. El blanco y el azul se entremezclan en este rincón sereno del Cabo de Creus al que podemos acercarnos haciendo un agradable paseo.
Lo mejor para acercarse a Portlligart es caminar desde Cadeaqués, así se puede divisar unas bellas imágenes de la pequeña bahía y de la isla de Portlligat, que retrató en varias ocasiones el genial pintor. A pesar de que siempre hay muchísimos turistas que vienen a conocer la casa-museo, la placidez del lugar no se ve alterada.
Quizás la quietud del mediterráneo, quizás la serenidad del paisaje, contagian de armonía y tranquilidad a quien visita este recóndito rincón de la Costa Brava. Portlligat también tiene varias calas donde uno se puede bañar y disfrutar de sus magnificas aguas tranquilas.
- Playa de Cadaqués: Ideal para un día de vacaciones, sin prisa, solo el momento de disfrutar de un paisaje. Vistas increíbles para la retina, lugar perfecto para ver un precioso amanecer. Las casitas blancas, el agua transparente y el sol te invitan a bañarte y a desconectar de la gran ciudad. Es un lugar en el que su luz proporciona diferentes imágenes de postal en infinidad combinaciones de colores.
- Puerto de Cadaqués: Es bonito ver sus pequeñas barcas de pescadores, teniendo en cuenta que fue una población dedicada a la pesca, que vivió de cara al mar y prácticamente separado por tierra, del resto del Ampurdan, hasta finales del Siglo XIX. Se conocen Ordenanzas de Pesca de Cadaqués, que datan del Siglo XVI. En el Siglo XIX fueron famosas las industrias de salazones, que no lo son tanto actualmente, pero en el pasado formaron parte de la economía local, destacándose entre ellas las Anchoas de Cadaqués.
- Cala Montjoi: Considerada como una de las calas más bellas de España, se encuentra a unos siete kilómetros de Roses (Girona), en el entorno del Cabo de Creus. Es una cala muy cerrada y de aguas limpias y tranquilas, a la que se puede acceder por carretera.
En ella se encontraba el restaurante El Bulli de Ferrá Adriá. Unas vistas Impresionantes de la naturaleza en estado virgen y un lugar ideal para desconectar del mundo o para las familias que tienen niños porque se lo pasan muy bien con todas las actividades que les organizan.
- Cala Culip: Es una cala propiedad del Club Mediterranee, al que se accede gracias a un pase de visitante. Situada cerca del Cabo de Creus, a escasos kilómetros del faro, famosa por los restos de barcos de la antigua Grecia y Roma que naufragaban al intentar buscar allí refugio para evitar los fuertes vientos que se soplaban por allí.
Muchos de estos barcos no lograban protegerse por lo que acababan en el fondo del mar, donde en la actualidad están siendo encontrados y estudiados. Paisaje encantador para disfrutar de un chapuzón y añadir fotos espectaculares de la costa brava.
- Bahía de Cadaqués: Dar un paseo por la preciosa bahía de Cadaqués, con la mejor compañía posible: La puesta de sol, el mar, Salvador Dalí, y nuestros seres queridos es algo que no tiene precio. Por eso un genio como Dalí se enamoro de esta ciudad, repleta de rincones, abrazada por el mar y en un entorno natural espectacular. Lugar ideal si te gusta andar o montar en bici.
- Estatua de Dalí: Su estrecha relación con Dalí ha generado un importante turismo cultural donde destaca la casa museo del pintor como lugar de culto. Numerosas personalidades de la cultura y el arte se han acercado a esta población y la han convertido en un importante referente cultural.
Es por ello que se ha erigido esta estatua del pintor en pleno paseo marítimo. Pero no sólo su relación con el célebre pintor Salvador Dalí sino también la belleza de su costa y de una población que conserva todo su encanto, la han convertido en uno de los lugares turísticos por excelencia de la costa catalana.
- Cadaqués y el Cabo de Creus: Su posición geográfica lo sitúa como el pueblo más oriental de la Península Ibérica. Así mismo, su término municipal ocupa la mayor parte de la costa de levante del macizo del Cabo de Creus, hogar del Parque Natural del mismo nombre, lo que transforma a Cadaqués en el destino perfecto para conocer toda la riqueza natural que alberga la zona.
Este parque natural, constituido como tal en el año 1998, es el parque con más superficie protegida de la comunidad catalana. El territorio cuenta con una gran diversidad florística protagonizada por especies endémicas, o atractivas especies subacuáticas.
- GR 92, De Cadaqués a Roses: Que mejor manera que recorrer las preciosas calas de la comarca del Alt Empordà que recorriendo un tramo del GR92. Comenzado por Cadaqués, típico pueblo costero, con un encanto especial, hasta llegar a la localidad de Roses. Son 22 Km duros, de continuas subidas y bajadas, ya que el recorrido transcurre en su mayoría por las abruptas calas.
Durante el recorrido, visitaremos calas como Cala Montjoi (famosa por que allí está el Restaurante el Bullí), Cala Joncolls, etc. Son Calas rocosas, donde a veces el acceso es difícil, pero de extremada belleza.
- Faro del cabo de Creus: En la punta del Cabo de Creus se encuentra el mítico Faro de Creus (término municipal de Cadaqués), lugar donde se rodó la película La luz del fin del mundo y donde actualmente se encuentra un museo de Geología y una oficina de Turismo donde se facilita la información para hacer recorridos a pie en el territorio del Parque Natural.
En la punta de la Esquena estaba situada una antigua torre de vigía. Fue el último de los faros del primer Plan de Alumbrado, que fue encendido por primera vez en 1853, con un alcance de 15 millas. Durante la Guerra Civil española se apagó por orden de las autoridades militares de Cadaqués. Forma parte del escenario de paseos entre el mar y las rocas en un paisaje excepcional.
- Sa Conca: El festival Internacional de Música de Cadaqués se organiza en esta playa. Es uno de los acontecimientos más importantes y representativos de la población. Sirve como punto de encuentro de afamados músicos, solistas, directores y compositores.
Forma parte de la historia reciente de Cadaqués y, hasta su reformulación del 2008, se estructuró en conciertos de música clásica dentro de la iglesia y conciertos gratuitos repartidos por diversos puntos del pueblo en los que se podían escuchar variedades musicales.
- Diving Port Lligat: Es un centro de submarinismo situado en Cadaqués en el que se pueden realizar tanto salidas programadas, cursos para obtener el certificado de varios niveles o una primera inmersión o como ellos le llaman un "bautizo" al submarinismo.
Una experiencia realmente genial, ya que la gran reserva de fauna marina nos brinda la experiencia de ver gran cantidad de peces, corales y otros animales submarinos. Destacar la profesionalidad y seguridad con la que te tratan todos los monitores, te inspiran gran confianza y además saben cómo convertir esta experiencia en algo relajado, divertido y fácil de disfrutar.
- Casa Blaua o Serinyana: Edificio modernista del paseo marítimo conocido como la casa Blaua (casa azul) o antigua casa Serinyana. Data de 1910 o 1913. Está emplazada en el paseo marítimo al lado de la Playa Grande, el que se encuentra más próximo a la Playa des Poal. Nos recuerda que el modernismo catalán es una belleza para el arte contemporáneo.
Estamos pues ante otro gran ejemplo de arquitectura indiana en la Costa Brava. Echando un vistazo desde fuera al edificio podemos ver su bella factura, y algunos detalles dignos de interés. Su estilo es modernista y está compuesto de tres pisos y buhardilla.
En la fachada se aprecian bellos forjados de las finestras y los balcones, y la cerámica que la decora tiene unos tonos azulados que es la que da nombre a su otra denominación, Casa Blaua (del catalan blau: azul).
- Cala Sant Lluis Cadaqués: Cala Sant Lluís es una muy buena playa nudista que se encuentra en la bahía de Guillola, en Cadaqués, y forma parte del Parque Natural del Cabo de Creus. Lugar peculiar, de difícil acceso, pero con todo lo que un apasionado en la búsqueda de calas vírgenes puede esperar. En teoría se trata de una cala nudista. Normalmente fuera de temporada ,des de mayo a finales de junio un 80 % de nudistas , en julio i agosto un 25 % nudistas.
Alrededor de este lugar se plantaban viñas (casi extinguidas por la plaga de la filoxera del siglo XIX) y olivos (que todavía subsisten, de hecho existe la denominación de origen de aceite de oliva de Cadaqués, denominado Verdal). Denominada también playa dels Noues, por el apellido a la que pertenecían antaño estos terrenos, forma un precioso entrante de mar y es un lugar muy tranquilo.
La playa de Sant Lluís está compuesta de guijarros aplanados y tiene unos 40 metros de longitud por unos 15 de anchura. No posee servicios, pero a cambio encontraremos una playa totalmente natural rodeada de cultivos. Al estar orientada al sudeste suele estar bastante protegida del viento de tramuntana, que viene del norte.
Podemos llegar cerca de Cala Sant Lluís en vehículo y caminar unos 300 metros a pie para llegar a ella. Simplemente hemos de tomar la carretera que lleva desde el centro de Cadaqués hasta el faro y, a la altura de la bahía de Guillola, y una vez pasada la cala de Jonquet, nos detendremos frente a una valla verde. Aquí encontramos un indicativo del sendero que conduce hasta la cala, a la distancia indicada anteriormente.
- Iglesia de Santa María: En el casco antiguo de Cadaqués, en el punto más alto de su centro urbano, se encuentra la iglesia de Santa María, cuya plaza ofrece además una de las mejores vistas sobre la bahía de la localidad.
A simple vista es una iglesia normal, eso sí, ha respetado totalmente el estilo de construcción del pueblo. Lo encantador que tiene es que justo donde se encuentra la puerta. Justo en ese pequeño espacio, tiene un mirador de esos que jamás vas a olvidar con unas vistas al mar impresionantes.
Aunque la iglesia fue originalmente construida en el siglo XIII, el saqueo que sufrió por los piratas sarracenos en 1543 (en concreto por el pirata turco Barbarroja) obligó a reconstruirla en los años posteriores, por lo que el actual edificio, de estilo gótico, se conserva desde el siglo XVI.
Para acceder a la iglesia y a su maravilloso mirador tendremos que subir por las empinadas callejuelas blancas de Cadaqués. Es posible que en algún momento tengamos que preguntar a algún lugareño sobre la dirección correcta, ya que en la maraña de callejuelas no siempre encontramos indicaciones.
La Iglesia de Santa María de Cadaqués es el edificio religioso más emblemático. Está formado por una nave única con capillas laterales, ábside poligonal de siete cares y un campanario de torre de base cuadrado con el cuerpo superior octogonal. Llama la atención que todo el exterior de la iglesia sea blanco, algo típico de las localidades eminentemente marineras como Cadaqués.
El retablo del altar mayor, que destaca ante la sobriedad exterior, está dedicado a la Virgen de la Esperanza, es de estilo barroco, y fue realizado Pau Costa. Está compuesto de madera dorada y muestra una viva iconografía, como por ejemplo la de la representación de los propios marineros que sufragaron la obra. La iglesia alberga 9 retablos más también elaborados en madera dorada, de tamaño inferior.
- Cueva del infierno (Cova de l'infern): La Cova de s’Infern (Cueva del Infierno) es el arcaico nombre que recibe uno de los accidentes geográficos más fascinantes del Cap de Creus, la última extremidad con la que los Pirineos entra en el Mediterráneo. Por un bonito camino andando a 10 minutos del faro del Cabo de Creus, tenemos esta maravilla de la naturaleza creada por la erosión del agua sobre la roca formando este conducto en forma de arco que permite el paso del agua.
Al parecer, el peculiar nombre que recibe esta cueva marina se debe al color amarillento y rojizo que se observa en el fondo de sus aguas cuando sale sol, y que evoca a la puerta del infierno. Más allá de la leyenda, lo cierto es que la visita a este punto del Cabo de Creus, situado en su parte más oriental, se convertirá en una gran experiencia para el caminante y el bañista. Para llegar a él podemos partir a pie desde el faro del Cabo de Creus y recorrer durante unos 10 minutos el sendero que nos llevará a esta maravilla natural.
La Cova de s’Infern es un fenómeno causado por la erosión controlada provocada por el agua. En muchos casos estamos acostumbrados a ver cómo la fuerza del agua logra romper la roca y formar entrantes de agua. Sin embargo, en este caso, la roca ha llevado a cabo un movimiento dúctil de deformación, de manera que no se ha roto completamente, sino que ha amoldado la forma, mediante un orificio y techo, que permite el paso del agua. Realmente extraordinario.
La gran parte de las personas que visitan el lugar, sobre todo en verano, no pueden evitar tomar un baño en sus limpísimas aguas, que forman parte del Parque Natural del Cap de Creus. Tal y como se puede observar en la imagen es posible atravesar la cueva mediante embarcación, sobre todo si tiene poco calado o bien es un kayak.
- Itinerario Geológico de Cabo Creus: Durante el recorrido del Parque Natural del Cabo de Creus se observan curiosas formaciones rocosas con unas formas muy curiosas que el viento ha erosionado formando pliegues, cortes, abultamientos, etc. Ni las rocas con las caprichosas formas que la erosión del agua y del viento ha esculpido: con un poco de imaginación podrás ver en ellas leones, dragones, camellos, águilas y otras figuras.
Destacan mucho un tipo de rocas de color blanco amarillento que aparecen entre las rocas de color más oscuro que se llaman pegmatitas que son un tipo de rocas ígneas intrusivas. El recorrido sigue en dirección a la Cova d'el Infern y vuelve hacia el faro del cabo de Creus. También conservarás el recuerdo del interior del parque, un paraíso biológico de bosques y prados que puedes recorrer en mil y una excursiones, que te permitirán, también, conocer sus tranquilos municipios: Llançà, El Port de la Selva, La Selva de Mar, Cadaqués, Roses, Palau-saverdera, Vilajuïga y Pau.
- Isla de S'arenella: La isla de S’Arenella, frente a la costa de Cadaqués, en el Cap de Creus, es la última isla habitada de la Costa Brava y un pequeño paraíso al que es muy fácil llegar a nado, puesto que sólo se encuentra a 100 metros de la playa más cercana, s’Arenella.
- Cala Guillola: Cala Guillola se encuentra en la bahía del mismo nombre, al norte del centro de Cadaqués y también de la bahía de Portlligat. La preciosa bahía de Guillola se encuentra junto a la de Es Jonquet, y en ella se encuentran además las playas d’en Paquela, Sant Lluis y dels Noues. Es un lugar con un paisaje espectacular y con un muy buen fondo para anclar, ya que se encuentra orientada al sureste y constituye un buen refugio para las embarcaciones que se quieren proteger cuando sopla el viento del norte, la Tramuntana, sobre todo en invierno.
Además el fondo de Cala Guillola es de arena y algas, bastante cómodo también para los bañistas. No tanto la superficie de la playa, que es de guijarros. En total Cala Guillola tiene 55 metros de longitud por unos 15 metros de anchura. Es posible acortar el camino en vehículo en la misma dirección, y entonces el camino que sale a recorrer a pie es de sólo 300 metros. Por eso es tan popular en verano.
Cala Guillola, a pesar de estar retirada del centro de Cadaqués suele estar medianamente concurrida en verano. Una manera muy interesante de llegar a ella es hacerlo a pie, siguiendo el mismo recorrido que el Cala Es Jonquet, entre campos de olivos, vides y antiguos muros de piedra seca que delimitaban las plantaciones. En total serán unos 3500 metros aproximados para el camino de ida y otros tantos para el de vuelta, con un desnivel máximo de 70 metros sobre el nivel del mar. Si seguimos en esa misma dirección norte a menos de 4 Km también encontraremos el Faro del Cabo de Creus, atravesando los que quizás sean los paisajes más bucólicos de todo el Parque Natural, del que forma parte la cala.